miércoles, 2 de mayo de 2012

Reflexión


Si dejamos el resumen a parte y nos centramos más en el análisis y reflexión, observamos que el título del artículo viene a partir del ejemplo del hijo de su amigo, que le contó que al niño en un examen le preguntaron ¿Cómo viven las vacas? Y él en ese momento utilizó más la lógica que lo que había memorizado del libro y contestó: muy bien. Como es comprensible le pusieron que la respuesta era incorrecta, ya que las vacas pueden vivir en ganadería extensiva e intensiva. Justo en este momento del texto el autor pone la frase “los instrumentos de evaluación condicionan el estilo de aprendizaje, la forma de aprender. La podemos interpretar de manera en que la manera en cómo nos van a evaluar puede cambiar la forma en la que nos aprendemos las cosas y los conceptos. Por ejemplo, y siguiendo el modelo del texto, si la manera en cómo nos evaluaran es mediante un examen o “control”, las personas lo que suelen hacer es empollarse todo el temario y una vez llegan al examen lo escriben tal cual sale en el libro o sea cual sea la fuente de información. En cambio, si nos evaluasen de otra forma, las maneras de aprender tal vez no serían mediante la memorización, sino que la misma persona se encargaría de aprenderse los conceptos / conocimientos, de manera que la misma mente tuviese que relacionar un concepto con otro, es decir, haciendo trabajar la mente.  

Yo creo exactamente lo mismo, que todos los conceptos nos los podemos aprender de una forma u otra, pero siempre estará determinada por la manera en cómo nos avaluaran y la motivación que tengamos al respecto, es decir, “la metodología condiciona la evaluación, pero la evaluación condiciona el aprendizaje”.  Básicamente, la afirmación anterior vendría a ser lo mismo que lo que hemos comentado con anterioridad, la manera de evaluar y la forma de aprenderse los conocimientos está muy relacionada. 

El autor en el texto nos dice que  la evaluación sirve tanto para los profesores como para los alumnos, ya que la manera de evaluar puede servir como mejora para la forma de enseñar de los profesores. Es en esta parte del artículo cuando Miguel Ángel escribe la frase “La evaluación tiene un componente de comprobación (muy complejo), pero otro de atribución (no menos problemático)”. La podemos entender de manera que el autor piensa que la evaluación como hemos dicho antes, sirve tanto para el alumnado como para los docentes. Desde mi punto de vista, el alumnado sería el que se tendría que relacionar con el componente de comprobación, es decir, los alumnos son evaluados para comprobar si realmente se han aprendido (ya sea memorizando o no) todos los conceptos. Los profesores serían eso relacionado con el componente de atribución, ya que comparando el resultado de los alumnos, los maestros pueden darse cuenta de si su manera de enseñar es correcta o no. 

Si la mayor parte de los alumnos de una clase aprueba el examen, el profesor puede entender que su manera de ejercer la profesión es buena, ya que la mayor parte de los alumnos sacan más de un aprobado en el examen, en cambio, si la mayor parte de la clase suspende puede o no significar que el profesor no ejerce bien su profesión y se está equivocando a la hora de explicar los conceptos. En mi opinión, estoy totalmente de acuerdo con esta afirmación del autor, ya que la manera en como explica un profesor influye mucho a la hora de estudiar esa asignatura. 

               Hay una oración del artículo que me ha llamado la atención y es: “Los niños aprenden pronto que más importante que aprender es aprobar”. Realmente, esto es así, ya que actualmente los niños y niñas en los colegios no se fijan realmente en los conceptos que les dan en clase, ni se centran en ellos. Estos, ponen toda su atención y toda su dedicación a hacer lo que sea para aprobar el examen (mediante chuletas, la memorización, etc…), ya que lo que quieren de verdad es hacer contentos a sus padres y hacer que estos se sientan orgullosos de sus hijos porque aprueban todos los exámenes y sacan buenas notas, o simplemente para recompensas exteriores, ya que muchos padres “chantajean” a sus hijos diciéndoles que si no aprueban el examen los castigarán sin televisor, por ejemplo. Con estas actitudes, por parte de los mayores, es normal que los alumnos se centren solamente en aprobar el examen y no en preocuparse de haber si entienden lo que están estudiando / memorizando o no. A parte también, que los alumnos saben que si suspenden todo repetirán de curso y eso no es de su agrado.

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